Richard Buckminster Fuller ha sido tachado de visionario por unos y de utopiano por otros, pero lo cierto es que algunas de sus obras y sobretodo su mensaje, ha trascendido a lo largo de más de medio siglo hasta la actualidad, cuando la humanidad está empezando a ser consciente de la urgencia de contar con conceptos como la sostenibilidad y el retorno social del progreso como medidas básicas para la supervivencia mundial a largo plazo.
Durante su vida, Fuller buscó respuesta a la pregunta «¿Tiene la humanidad una posibilidad de sobrevivir final y exitosamente en el planeta Tierra y, sí es así, cómo?». Considerándose a sí mismo un individuo medio sin especiales medios económicos o título académico, eligió dedicar su vida a esta cuestión, intentando descubrir si un individuo podía mejorar la condición humana de una forma que no podían hacer los gobiernos, las grandes organizaciones o las empresas privadas.
The Buckminster Fuller Institute dedica toda su actividad al desarrollo y expansión de las soluciones que contribuirán a un avance considerable del ser humano dentro de unos márgenes sociales y medioambientales adecuados. Fundamentalmente tratan de apoyar y “apadrinar” a toda una nueva generación de pioneros en el diseño y la ciencia que van a liderar la creación de una economía global sostenible y beneficiosa para todos.
Durante su vida, Fuller buscó respuesta a la pregunta «¿Tiene la humanidad una posibilidad de sobrevivir final y exitosamente en el planeta Tierra y, sí es así, cómo?». Considerándose a sí mismo un individuo medio sin especiales medios económicos o título académico, eligió dedicar su vida a esta cuestión, intentando descubrir si un individuo podía mejorar la condición humana de una forma que no podían hacer los gobiernos, las grandes organizaciones o las empresas privadas.
The Buckminster Fuller Institute dedica toda su actividad al desarrollo y expansión de las soluciones que contribuirán a un avance considerable del ser humano dentro de unos márgenes sociales y medioambientales adecuados. Fundamentalmente tratan de apoyar y “apadrinar” a toda una nueva generación de pioneros en el diseño y la ciencia que van a liderar la creación de una economía global sostenible y beneficiosa para todos.
Basado en la intención de Richard Buckminster Fuller: "para hacer que el mundo trabajan para el 100% de la humanidad, en el menor tiempo posible, mediante la cooperación espontánea sin delito ecológico o desventaja a nadie", cada año, el Instituto organiza la competencia, donde un distinguido jurado otorga un premio de 100.000 dólares para apoyar el desarrollo y la aplicación de una estrategia que tiene un significativo potencial para resolver los problemas más progessing de la humanidad.
El Buckminster Fuller Institute está aceptando nominaciones para el 2010 Challenge. La fecha límite es la medianoche, de el 30 de octubre de 2009.
Mas informacion:
http://challenge.bfi.org/home
http://www.vimeo.com/1163719
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